Vacuna antigripal: preguntas y respuestas
*** La vacuna antigripal ha demostrado ser eficaz en todo el rango de edad de población, con porcentajes que varían entre el 30 % y el 74 %, dependiendo de la temporada y de la concordancia de la vacuna.
El desarrollo de la vacuna antigripal ha supuesto un gran avance en el campo de la medicina. Su uso ha permitido salvar miles de vidas, pues nos protege de padecer gripe, una de las enfermedades más comunes en la actualidad.
De hecho, la gripe es la condición inmunoprevenible más frecuente en los países desarrollados. Se trata de una enfermedad infecciosa aguda que afecta a las vías respiratorias de cualquier persona, ya sea un recién nacido, un adulto o una persona mayor.
La administración de la vacuna antigripal es la forma más efectiva a la hora de prevenir esta enfermedad y sus complicaciones. Desde que se introdujo en España, a principios de los años 80, la vacuna ha demostrado ser eficaz en todo el rango de edad de población con porcentajes que varían entre el 30 % y el 74 %, dependiendo de la temporada y de la concordancia de la vacuna.
Asimismo, se estima que la vacunación antigripal reduce en un 80 % el número de hospitalizaciones por neumonía en personas mayores de 65 años y alrededor de un 22 % la mortalidad en adultos mayores de 75 años con enfermedades crónicas.
No obstante, a pesar de ser una vacuna muy habitual en la población general, sigue habiendo una serie de preguntas que requieren respuesta. A continuación, explicamos algunas de las dudas más comunes para comprender mejor su eficacia y funcionamiento.
¿Por qué la vacuna antigripal se administra cada año?
Una de las características más destacables del virus que produce la gripe es que puede cambiar su estructura de forma muy rápida. Este cambio se le conoce como mutación. Por ello, la vacuna de la gripe se tienen que rediseñar cada año para proteger a la población.
Los tipos de virus de la gripe se denominan A, B y C. El primero suele ser el responsables de los grandes brotes de gripe y está constantemente mutando. El tipo B suele desencadenar pequeños brotes y el C enfermedades leves.
¿Quién se tiene que vacunar de la gripe?
La vacuna antigripal se tiene que administrar cada año a una serie de grupos poblacionales que están considerados como grupos de riesgos. Asimismo, también se debe administrar a los colectivos que atienden o conviven con estas personas que tienen más probabilidades de ser infectadas.
Los grupos de riesgo son:
- Mayores de 65 años.
- Adultos o niños con problemas pulmonares o cardíacos.
- Residentes en asilos y de cualquier institución que convivan con personas con enfermedades crónicas.
- Personas tratadas durante el año de fibrosis quística, problemas de riñón, anemia, asma severo o enfermedades metabólicas crónicas.
- Personas inmunodeprimidas, como los pacientes tratados con quimioterapia o con SIDA.
- Niños y adolescentes tratados con aspirina durante un largo periodo.
¿La vacuna antigripal tiene efectos secundarios?
La vacuna antigripal es una formulación muy segura, por lo que en la mayoría de los casos no presenta ningún efecto secundario. Sin embargo, al igual que todos los medicamentos en el mercado, no está exenta de producir alguna reacción adversa.
Las reacciones adversas de los medicamentos son todos aquellos síntomas que se producen de forma indeseada y no intencionada con el tratamiento de un fármaco. En este sentido, la vacuna antigripal puede producir, aunque en muy raras ocasiones, un poco de fiebre durante algunos días o dolor en el punto de inyección.
¿En qué situaciones no se debe administrar esta vacuna?
Al igual que hay una serie de grupos a los que se debe vacunar, hay otros en los que esta vacuna está contraindicada. También hay otras personas deben consultar con un médico si recibir la vacuna o no, ya que deben valorar el riesgo-beneficio. Hablamos de los siguientes grupos poblacionales:
- Personas que sean alérgicas al huevo, ya que la vacuna puede contener proteínas del mismo.
- Pacientes que sufran fiebre o enfermedades graves.
- Las mujeres embarazadas o con un posible embarazo.
Las personas que no deben recibir esta vacuna son las que haya tenido una reacción moderada o grave después de la administración de una dosis y las que alguna vez hayan sufrido parálisis por causa del síndrome de Guillain-Barre, según como indican los estudios realizados.
Conclusión
La vacuna antigripal ha supuesto un gran beneficio para la salud de las personas. Consulta con el médico si debes vacunarte anualmente, si no debes recibir la vacuna o si no es necesario que te vacunes. Mejorconsalud