Los Reyes Magos, figuras tradicionales de gran veneración
*** Los Reyes Magos son personajes importantes en las tradiciones navideñas, aunque hay muy pocos datos históricos sobre ellos.
Según la tradición, cada 6 de enero los tres reyes magos entregan regalos a los niños, como un recordatorio de la visita que hicieron al Niño Jesús. Es la fiesta de la Epifanía o de la manifestación de Cristo a la humanidad.
Sin embargo, lo que se sabe de ellos está basado en la tradición oral y algunos escritos históricos.
De hecho, la Biblia no dice que hayan sido tres, ni que sus nombres fueran Melchor, Gaspar y Baltasar.
Marco Polo, el explorador italiano del siglo XIII, escribió sobre ellos cuando viajó por Asia. En sus memorias indica que venían de Persia y que se reunieron en la ciudad de Sava para ir en busca del Mesías.
La beata y vidente Anna Catarina Emmerich, quien vivió en Alemania en el siglo XIX, relata que los verdaderos nombres eran Teokeno, Mensor y Sair, y que el cambio de nombres se debe a una cuestión de significados personales.
Al respecto, Gaspar (probablemente Mensor) es un nombre índico que significa va con amor; Melchor (Teokeno) es persa y quiere decir se acerca con dulzura, y Baltasar (Sair) en árabe, une su querer a la voluntad de Dios.
Teokeno era el anciano; su piel era amarillenta y venía de la Media, al Este del Mar Caspio. Mensor era el de los cabellos negros, y el más joven de los tres. Provenía de Caldea y vivía a tres días de viaje del hogar de Sair. Este último era el más moreno; venía de un sitio llamado Panthermo y ya estaba reunido con Mensor el día del nacimiento de Cristo.
El color atribuido a su piel está probablemente relacionado con los tres continentes que eran conocidos al momento del nacimiento de Cristo: Europa, Asia y África.
Otro dato curioso de la visita de los magos al pesebre es si realmente hubo una estrella que guió a los sabios a la casa donde se encontraban Jesús, José y María.
La tradición menciona que un lucero o estrella fue orientando a los personajes hasta que se detuvo encima del lugar donde estaba el Mesías.
En tal sentido, ha habido estudios científicos sobre una posible alineación planetaria o el paso de un cometa.
El astrónomo del siglo XVI Johannes Kepler fue el primero en plantearse si una conjunción de Júpiter y Saturno, a principios del siglo I, el fenómeno que menciona la Biblia.
Según las Sagradas Escrituras, reforzadas por la tradición, los sabios (también llamados reyes magos) abrieron sus cofres y ofrecieron oro, incienso y mirra.
Oro, por la realeza del niño recién nacido, incienso por su carácter divino, y mirra como señal de su humanidad.
Otro dato curioso de los magos es si eran tres o cuatro, lo cual ha sido puesto en duda a lo largo de los siglos. Sin embargo, el número aceptado por tradición es tres, por asociación con el número de regalos entregados.